PROTESTO

Otra vez -creí- que me robaron "mi" contento,

era evidente que no lo había conquistado, 

¡Qué ceguera la ilusión del tener!  

¡ afortunada lo vi !

No hay conquista posible del contento, 

porque el contento es la vida misma,

y la vida no se conquista  -aunque nos hayan contado lo contrario-.

no es posible poseerla, 

Y yo soy la vida.

También he sido hombre,

mas hoy encarno a la tierra,

madre de la vida acá donde habitamos;

me he perdido en su protesto,

me he perdido en su inmensa herida,

que es impersonal.

Por eso permanezco,

igual que ella permanece.

Enferma, 

herida, 

nunca de muerte, 

siempre reviviendo.

 

¿Cómo combino mi luz?

¿Cómo integro la luz con en la materia?

¿Cómo logro moverme para devolver la vida a la vida?

El miedo es el peor raptor

Me quieren llevar ustedes a sus túneles sombríos;

Ustedes,

poderosos, 

abusivos de su indefensión infantil,

que latiga sin piedad a la madre que me habita.

Blanda sucumbí antes,

severa me convertí en yang desalmado.

Soy una y todo habita en mí,

Es preciso recordármelo para nivelar la polaridad fatal.

La consumación de la femineidad,

Una prueba de iniciación,

La más feroz,

La más peligrosa,

En su vertiente última.

Puede ser el fuego

El agua

O el final.

. . . Somos inocentes.